En el proceso de creación de estas piezas se concentran todos los estados posibles (al menos los más palpables) por los que atraviesa la sustancia mineral, porcelana, árbol, papel.

La fragilidad es por definición, la capacidad que tiene un material de fracturarse debido a su escasa o nula capacidad de deformarse y está relacionada con la velocidad de propagación o crecimiento de grietas a través de su seno cuando son sometidos a esfuerzos. Por el contrario los materiales tenaces son aquellos que son capaces de frenar el avance de grietas que le pueden quebrar. Desde el ahora, el pasado, se me antoja como un mundo predecible y controlable, sólido. Los tiempos actuales discurren, basándose en los conceptos de fluidez, cambio, flexibilidad y adaptación.

Me planteo que esa fluidez es solo aparente. Vivimos en una sociedad de individuos porque «todo se ha individualizado». Se ha conformado un sistema tan grande que ahora cada individuo es culpable de su destino, de lo que le pasa o no. Solos, pequeños, delicados.